Combates en Damasco y en el noroeste del país ponen en duda si se cumplirá con la tregua acordada por Naciones Unidas con el gobierno y la mayoría de los grupos insurgentes. Acusaciones cruzadas.
Combates en la capital de Siria y en el noroeste del país, con un saldo provisional de tres muertos,rompieron prácticamente la tregua acordada con las Naciones Unidas con motivo de una fiesta musulmana.
En uno de los suburbios de Damasco, llamado Harasta, se escucharon disparos de tanques y de francotiradores que dejaron al menos tres personas muertas, según las agencias Europa Press y DPA.
También se registraron enfrentamientos en una base del Ejército de Maaret al Numan, al noroeste de Siria, sostuvo el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, con sede en Londres.
"El Ejército respondió bombardeando la aldea de Deir Sharqui. Esta es la primera violación de la tregua", agregó uno de los voceros de la organización.
La denuncia no fue confirmada en medios oficiales, ni tampoco ningún periodista independiente pudo indicar cuáles de los dos bandos abrieron fuego primero y rompieron la tregua.
El Observatorio aseguró que entre los combatientes están militantes del Frente Islamista al Nosra, que se atribuyó numerosos atentados en Siria y que rechazó enérgicamente la tregua impulsadapor el mediador internacional Lajdar Brahimi, indicó la cadena BBC.
Antes de los combates, a primeras horas de la mañana, parecía que la tregua en los enfrentamientos que ya costaron unos 30.000 muertos iba a funcionar y miles de personas aprovecharon la calma para organizar algunas de las manifestaciones opuestas al régimen más grandes en meses.
La tregua propuesta de Brahimi -enviado de la Liga Arabe y de las Naciones Unidas- cuenta con el respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU y sólo tenía previsto durar los cuatro días del feriado de Eid al-Adha (la fiesta del sacrificio), carece de un mecanismo para monitorear su cumplimiento y no cuenta con planes posteriores.
El gobierno de Bashar al Asad, cuyo partido lleva más de medio siglo en el poder y califica a los insurgentes como "terroristas", había anunciado ayer que suspendería sus operaciones militares durante el Eid.
"Por ocasión del sagrado Eid al-Adha, el comando general del Ejército y las fuerzas armadas anuncian que detendrán sus operaciones militares en el territorio de la República Arabe de Siria, desde el viernes por la mañana (...) hasta el lunes", señaló el gobierno en un comunicado.
Sin embargo, había advertido que respondería si los "grupos terroristas armados continúan disparando contra los civiles y las fuerzas gubernamentales (...) o utilizando coches bomba y bombas", según un comunicado oficial.
Los insurgentes se apoderaron el 9 de octubre pasado de la ciudad de Maaret al Numan y desde entonces lanzaron varios ataques contra la base de Wadi Deif, la más importante de la región, donde esperan apoderarse de armas, municiones y combustible.
