Los investigadores del crimen de Candela Rodríguez, asesinada en 2010, en el partido bonaerense de Hurlingham, determinaron que el llamado a la familia de la víctima en el que amenazaron con que nunca encontrarían a la niña fue realizado por uno de los detenidos en la causa.
Fuentes judiciales informaron este martes a Télam que un peritaje realizado por los expertos de Gendarmería Nacional concluyó que esa voz amenazante pertenece en un cien por ciento a Leonardo Jara (34), procesado con prisión preventiva.
Según este informe, que llegó en los últimos días a manos del fiscal de la causa, Marcelo Tavolaro, se cotejó el patrón de voz de ese llamado obtenido de las escuchas telefónicas con los registros de todos los imputados y arrojó total coincidencia con Jara, precisaron los voceros.
"Hasta que esa conchuda no devuelve la guita, a la nena no la vas a ver nunca más. Que le pregunte al marido donde dejó la guita", se escuchó en el llamado analizado por los peritos.
Los pesquisas determinaron que esta comunicación con la tía de Candela se efectuó desde un teléfono público del barrio porteño de Retiro el domingo 28 de agosto pasado, tres días antes del hallazgo del cadáver de la niña que por entonces era considerada como desaparecida.
De acuerdo al auto de procesamiento de Jara del 23 de noviembre pasado, un testigo de identidad reservada había identificado la voz de ese llamado como la de Fabián Gómez (42), otro de los procesados por el homicidio de Candela.
Este mismo testigo fue el que declaró ante la Justicia que Jara se le estaba "haciendo el novio" a Candela porque sabía que la madre de la niña "tenía una plata guardada".
Jara permanece detenido en una unidad carcelaria ya que en marzo último el juez de Garantías Alfredo Meade le denegó la excarcelación extraordinaria.
Los otros imputados en la causa son Hugo Bermúdez (53), supuesto autor material; Alberto Espínola (31); Héctor "el topo" Moreyra (44); Gladys Cabrera (41); Guillermo López (31) y Néstor Altamirano (55).
Salvo Cabrera, dueña de la casa de la calle Kiernan 992 de Villa Tesei donde se cree que la niña estuvo cautiva antes de ser asesinada, y el carpintero Altamirano, el resto de los acusados permanece en prisión.
Sin embargo, Moreyra, López y Gómez fueron beneficiados con la excarcelación extraordinaria, aunque esa medida se hará efectiva una vez que sea confirmada por la Cámara de Apelaciones de Morón.
Candela (11) fue vista con vida por última vez el 22 de agosto de 2011, cuando salió de su casa en Villa Tesei, partido de Hurlingham, para ir junto a unas amigas a la reunión del grupo de boy scouts al que pertenecía, y el 31 de agosto apareció asfixiada dentro de una bolsa, a 30 cuadras de su domicilio.