(Ayer en Sexo Gratis comenzamos este relato erótico sobre lesbianas follando en un campamento. Al final del mismo incluimos un vídeo porno que lo ilustra. Úsalo con moderación
)
)No sé bien cómo empezó todo ahí dentro. Éramos jóvenes, las hormonas rebosantes, el hecho de que siempre había fantaseado con follar en una tienda de campaña, y aquellas de la otra tienda de campaña con sus gemidos que nos daban envidia.
El caso es que mi compañera debió de pensarse que yo también era lesbiana, así que se produjo un roce casual de nuestras pieles a través de los sacos, y ella hizo una broma sobre que las manos van al pan, y me preguntó que si tenía pareja, “pareja”… Yo todavía no sabía de qué iba la cosa, entonces hizo un comentario sobre que la gente se complica mucho con las relaciones, que lo mejor es dejarse llevar y…
Y en un momento me di cuenta de que esto iba de sexo con lesbianas, que me había metido en un campamento de bolleras, como lo habría llamado en otras circunstancias quizá despectivamente. Entonces ella, al verme incómoda, me preguntó que si yo entendía, vamos, que si es que no era lesbiana, y cuando le dije que no se partió de la risa y me cayó un poco mejor.
“En menuda situación te has metido”, rio de manera encantadora, y entonces me dijo algo que disparó mis hormonas, quizá porque el hecho de verme deseada por otra mujer me excitaba un poco, vamos, que era una experiencia que en el fondo me apetecía probar una vez. Lo que dijo fue que por un momento pensaba que yo era lesbiana y que había pensado en flirtear conmigo.
Uff, bueno, a partir de ahí la cosa llegó a una conversación más íntima, y al tipo de preguntas sobre si alguna vez había probado a besar a una chica y esas cosas que parecen cosas de preadolescentes, pero que luego pensé que quizá se trataba de una treta lésbica para ver si yo entraba al trapo.
Y lo cierto es que funcionó. Me dio un beso “para probar”, y yo me dejé, y el calor que me recorrió por toda la espalda hasta mi pubis hizo que me dejara llevar por una lesbiana experta como ella.
Sin duda, lo mejor de la experiencia (aparte de encontrarnos en una tienda de campaña) fueron las caricias y su extraordinaria pericia para el sexo oral, ya que como mujer sabía bien lo que a otra mujer le gusta.
¿Si volveré a repetir una experiencia con una mujer? Bueno, todo dependerá de si me apunto otra vez a algún campamento…
(Y a continuación, el video sexo gratis sobre lesbianas que ilustra el relato):
