Tres especialistas consultados por Télam repasan las principales características de la revolución bolivariana y analizan el impacto geopolítico que puede tener el resultado del domingo próximo.
Protagonista exclusivo de la política venezolana de los últimos catorce años, Hugo Chávez (Partido Socialista Unido de Venezuela) buscará que la mayoría de los casi 19 millones de venezolanos habilitados para votar el domingolo coloquen en la presidencia por tercera vez consecutiva desde que ganó su primera elección en 1998.
El principal adversario de Chávez es Henrique Capriles Radonski, candidato por la Mesa de Unidad Democrática (MUD). Aunque fue gobernador del estado de Miranda entre 2008 y 2012, este joven empresario no proviene de la política tradicional.
Sin embargo, Capriles cuenta con el respaldo de los partidos tradicionales (la socialcristiana COPEI y la socialdemócrata Acción Democrática) y de quienes impulsan un retorno a las políticas neoliberales y a la alineación con los Estados Unidos.
También participarán de los comicios, en los que se elegirá presidente para el período 2013-2019,otros cuatro candidatos: Orlando Chirinos (PSL), Luis Reyes Castillo (ORA), Reina Sequera (PL) y María Bolívar (PDUP).
El huracán Hugo
Hugo Chávez Frías irrumpió en la política venezolana cuando en 1992 intentó deponer, sin éxito, al entonces presidente Carlos Andrés Pérez y a sus políticas impopulares. Terminó preso y debió esperar seis años para acceder al gobierno a través de la vía electoral.
En los comicios de 1998, Chávez fue elegido presidente por primera vez con el 56,20 % de los votos. Desde entonces, produjo profundas transformaciones políticas, sociales y económicas, que fueron avaladas una y otra vez por el voto popular.
Para Andrés Asiain, economista y docente dela Universidadde Buenos Aires, con el arribo de Chávez al gobierno Venezuela pasó de ser un país “exportador de petróleo que derramaba sus ganancias en una pequeña minoría” a “aprovechar los recursos de los hidrocarburos para sostener un proceso de consumo de masas, de fuerte inversión en el mercado interno”.
Según Asiain, este proceso derivó en mayor equidad social y un fuerte apoyo popular a la revolución bolivariana. “El consumo creció en 20 puntos del PBI, el desempleo disminuyó en 6 puntos, la pobreza pasó de alcanzar a la mitad de los venezolanos a un tercio de la población y cayó fuertemente la indigencia”, enumeró el economista.
La mejora en la situación económica fue acompañada por políticas sociales “que permitieron que muchos niños terminaran la escuela, la alfabetización de los adultos y que la salud llegara a los barrios más humildes, estirando la esperanza de vida en dos años y bajando fuertemente la mortalidad infantil, indicadores que señalan un mejor nivel de vida, que se traduce en un apoyo social fuerte de las mayorías populares a Chávez”, explicó Asiain.
Es en este contexto que el sociólogo Atilio Borón considera que la reelección del líder bolivariano profundizará “las mejores tendencias de la región hacia una creciente autodeterminación nacional, la recuperación de los recursos naturales y del patrimonio público, la profundización de las políticas de crecimiento con equidad y el fortalecimiento de la unidad latinoamericana”.
Un triunfo de Capriles, según el experto, representa “un retroceso en toda la línea a las décadas de los 80 o de los 90”. Sin bien prometió preservar las políticas sociales del chavismo, distintos analistas coinciden en que el candidato opositor tiene en carpeta un “paquetazo neoliberal”. “Capriles no es más que un simple mandante dela Casa Blanca”, sintetiza Borón.
Cuestión de impacto
El resultado de la elección también impactará fuera de Venezuela. El periodista venezolano Modesto Emilio Guerrero recuerda que su país tiene “124 acuerdos con Argentina de primer interés estratégico, 86 con Brasil y 360 con Cuba, sobre un total de 1800 acuerdos con países de América del Sur” y que “todo eso entraría en estado de riesgo si el gobierno no gana y se afectaría si gana por poco”.
Borón destaca los vínculos de la revolución bolivariana tanto con Argentina como con el resto de la región. “Con su ingreso al Mercosur se completó la ecuación política, económica y energética”, por lo que la continuidad de Chávez “va a fortalecer procesos de transformación y cambio como los que se están dando en Ecuador, Bolivia, Argentina, Brasil y Uruguay”.
Asaian destacó la sintonía entre estos países y Hugo Chávez para impedir que Estados Unidos imponga el ALCA en la región, “que hubiera implicado la desaparición de la industria regional y generado una mayor exclusión social”. También subraya la creación de organismos supranacionales como la Unasur y la Celac, que buscan dotar a América Latina “de un proyecto y una identidad propia”.
En cuanto a la relación conla Argentina, Asaian destaca los acuerdos celebrados entre los gobiernos de Chávez y Néstor y Cristina Kirchner. “Venezuela, por ejemplo, aportó hidrocarburos y, como contrapartida, un montón de empresas argentinas exportaron a ese país automóviles, leche, maquinaria agrícola, en un intercambio compensado que benefició a ambos países y multiplicó por diez el comercio, promoviendo la complementariedad y el empleo ”.
La relación entre ambos países también permitió, destaca Borón, “llevar adelante políticas comunes muy relevantes en materia de relaciones internacionales, como sucedió a la hora de defender la democracia en la región, como se vio frente al golpe en Paraguay”.
Zona de riesgo
Respeto a la que puede suceder el domingo, Modesto Guerrero destaca que ocho de nueve encuestadoras dan ganador a Chávez, mientras que la restante otorga un empate técnico, en la que los indecisos definirían la elección. Por lo tanto, explica Guerrero, el dilema es saber “por cuánto va a ganar Chávez”.
Este aspecto no es menor para el periodista, dado que “en situaciones políticas como la venezolana, donde los contenidos sociales y políticos son de carácter revolucionario, el tamaño con que gobiernes indica el grado de fuerza social que tienes, y eso es lo que garantiza la gobernabilidad”.
Sobre las posibilidades reales de que se registren irregularidades en los comicios, Guerrero recuerda que el ex presidente norteamericano Jimmy Carter y su centro de estudios consideraron alsistema electoral venezolano como “el más seguro del mundo”.
Además, Guerrero consideró que “el sistema electoral tiene un mecanismo electrónico inviolable, que tiene cinco pasos, desde cámaras hasta un ticket similar al de un cajero automático, donde dice a qué hora, cuando y por quién votaste”.
“La derecha venezolana, argentina, chilena, brasileña y norteamericana han lanzado una campaña de desprestigio, diciendo que va a haber fraude, porque saben que van a perder”, advierte Borón al referirse al clima que intentan crear sectores políticos junto a algunos medios de comunicación dentro y fuera de Venezuela.
“Estas denuncias de fraude tienen como objetivo preparar un clima de repudio, de rebelión e inclusive de sedición ante el resultado electoral, por eso hay que estar muy activos y llamar a todos los demócratas sinceros para rechazarlos”, consideró Borón.
Las denuncias no hacen más que confirmar la importancia de la elección y los intereses que están en juego. “El triunfo de Chávez –concluyó Asaian- es vital para la región, ya que de lo contrario seria más difícil seguir sosteniendo un proceso autónomo de los Estados Unidos, con mayor independencia económica, con mayor capacidad para que la región decida por sí misma sus políticas”.