Al menos 16 niños murieron por un alud que arrasó una escuela, y otros dos y un adulto continúan desaparecidos, en la localidad de Zhenhe, ubicada en la provincia de Yunnan, en el suroeste de China.
El alud, que se calcula fue de 160.000 metros cúbicos de tierra, cubrió a 19 personas, incluidos 18 estudiantes del edificio de la escuela primaria Tiantou, y a un aldeano.
"Los equipos de emergencia recuperaron los cadáveres de 16 niños, mientras siguen trabajando en la búsqueda de los tres desaparecidos", señalaron las autoridades locales.
El desprendimiento de tierra que se produjo ayer, en la aldea de Zhenhe, distrito de Yiliang, también dejó una persona gravemente herida y más de 800 afectados, informó el gobierno local, según despachos de las agencias Xinhua y Europa Press.
En cuanto a los daños materiales, el desprendimiento sepultó tres viviendas cercanas a la escuela y afectó más de 800 inmuebles. Además, bloqueó el cauce de un río formando una barrera natural de 15 metros de ancho por siete de profundidad.
En este contexto, las autoridades locales ordenaron evacuar a las más de 800 personas que viven en las inmediaciones del río y asegurar la zona, para lo cual movilizaron 2.000 efectivos de emergencias, que ya comenzaron a repartir `kits` de supervivencia.
Esa misma localidad ya había sido afectada por un terremoto, registrado el 7 de septiembre, siendo una de las más castigadas por el desastre que dejó 81 muertos y 800 heridos.
