La decisión da vista a las partes para que opinen si está en condiciones de ser enviada a juicio oral.
"Hay mucha jurisprudencia que avala mi decisión", dijo Oyarbide a la prensa en la puerta de su domicilio, y explicó que el envío a juicio oral de Macri "no es algo que ya esté resuelto como se dijo ayer, cuando verdaderas barbaridades salieron a decir". Para el magistrado, "hay una mala interpretación" de la decisión conocida ayer y precisó que lo que dispuso "es darle traslado a las partes para que viertan su opinion y saber si ellos interpretan que la causa está en condiciones de ser cerrada y elevada a jucio". En cuanto a la respuesta del jefe de Gobierno porteño, quien dijo ayer que Oyarbide "responde al kirchnerismo" y que la decisión judicial busca "trabar y obstruir" su gestión en la ciudad, el juez respondió: "no lo tomo como una acusación, son expresiones de Mauricio Macri". Según explicó el magistrado, en la causa por escuchas telefónicas ilegales, "hay muchas defensas, muchas personas procesadas, confirmado todo por la Cámara, y esto el juez lo dispone cuando se encuentran consolidados determinados hechos". "Macri tiene en Casación Penal dos incidentes que hace 19 meses están sin resolver, y puedo realizar estas vistas para escuchar a las partes. Tiene que expresarse en primer término el fiscal, luego la querella y las respectivas defensas, quienes pueden realizar las vías recursivas más amplias que se puedan imaginar", explicó. En cuanto al caso Schoklender, Oyarbide señaló que están previstas para hoy "dos indagatorias muy importantes", a Pablo Schoklender y Alejandro Gotkin, quienes solicitaron ayer su excarcelación, que fue denegada por el fiscal y ahora resta conocer la opinión del magistrado. Al ser consultado sobre porqué ordeno las detenciones antes de las indagatorias, el juez contestó: "yo dispongo lo que corresponde en base a elementos de la causa".
