Dirk Nowitzki parece haber afinado su puntería justo a tiempo para tener otro duelo vibrante contra Kevin Durant..
Estas dos superestrellas serán el foco de atención este lunes por la noche cuando Durant y el Oklahoma City Thunder intenten alargar su racha ganadora como locales a 13 victorias consecutivas, pero eso no será nada fácil ante los Dallas Mavericks de Nowitzki.
Nowitzki justamente anotó su cantidad de puntos más alta de la temporada el sábado pasado cuando Dallas (22-16) derrotó al Utah Jazz por 102-96 con 40 puntos del alemán y así quebró una racha de cuatro derrotas al hilo. El ala pívot de los Mavs anotó 20 unidades en cada mitad y llegó a anotar 13 puntos consecutivos para su equipo en el partido.
'Tuve un buen ritmo esta noche", dijo Nowitzki tras el encuentro. Dirk había tenido apenas un 39.3% de efectividad durante la mala racha de los Mavs. "No estaba lanzando bien, especialmente desde 15 a 16 pies de distancia. Yo solo quería ser agresivo y mis compañeros me siguieron dando el balón."
Durant, por su parte, está pasando por un muy buen momento y promedia 28.2 puntos por partido mientras pelea con Kobe Bryant y LeBron James por el título de máximo anotador de la NBA.
El alero del Thunder se vuelve todavía más letal cuando tiene a los Mavericks enfrente suyo con un promedio de 28.7 puntos que se traducen en una ventaja de 2-1 para Oklahoma City, líder de la Conferencia Oeste con una marca de 29-8. Vale la pena recordar que Dallas eliminó al Thunder en las Finales de la Conferencia Oeste la temporada pasada.
Nowitzki tampoco se queda atrás y promedia 21 puntos frente a Oklahoma City esta temporada. Eso sí, la última vez que estos dos equipos se enfrentaron el 1 de febrero, Nowitzki anotó apenas ocho puntos al encestar solo dos de sus 15 intentos en la derrota de los Mavs como locales por 95-86.
Esto último contrasta con su gran rendimiento en las finales de la Conferencia Oeste cuando promedió 32.2 puntos y se lució con dos partidazos de 40 puntos mientras Durant contribuía 28 unidades por encuentro.
Russell Westbrook, el base de Oklahoma City, será otro de los factores clave de este choque de titanes. Westbrook ha promediado 22 puntos en sus tres citas frente a Dallas, pero es uno de los peores bases de la liga controlando la pelota con un promedio de 4.1 balones perdidos por encuentro.
El Thunder como equipo se ubica último en la NBA con una media de 16.5 balones regalados, y el sábado tuvieron 21 de ellos que resultaron en 22 puntos para los Atlanta Hawks en la victoria de los Hawks por 97-90 que terminó con la racha de siete victorias consecutivas del conjunto de Scott Brooks.
"Debemos arreglarlo", dijo Brooks tras el partido. "Hemos hablado sobre ello y estamos trabajando para arreglar este problema. Debemos encontrar una solución porque si no va a ser muy difícil ganar consistentemente de la manera en que tendemos a perder el balón." Por otro lado, Durant anotó 35 puntos ante los Hawks pero fue ineficiente en el último cuarto en particular, cuando encestó tres de sus 10 tiros y el Thunder tuvo un 23% de efectividad en tiros de cancha.
El alero de 23 años dijo que la derrota fue dura tras haber ganado tantos partidos en fila, pero que él considera que el Thunder no debe lamentar la derrota para poder recuperarse rápidamente.
Oklahoma City va a estar confiado jugando como local, ya que Durant y compañia han ganado 15 de sus 16 compromisos en casa hasta ahora. El Thunder intentará conseguir la primera racha de 13 triunfos consecutivos como locales en la historia de la franquicia desde que eran los Seattle Supersonics y no cayeron en 17 ocasiones consecutivas entre el 11 de noviembre de 1994 y el 24 de enero de 1995.
Además, el Thunder tiene razones para ser optimista ya que han ganado seis de las siete veces que perdieron un partido anterior.
Dallas contará con la presencia de Lamar Odom. El alero de 32 años regresó al equipo con nueve puntos, cinco rebotes y tres tiros bloqueados frente al Jazz tras ausentarse de los cuatro partidos anteriores por cuestiones familiares y razones personales.
"Era algo muy personal con lo que tuve que lidiar", dijo Odom. "Mark Cuban es un gran dueño por haberme entendido y haber sabido que a veces uno tiene que arreglar lo que nos pasa fuera de la cancha para luego arreglar lo que nos afecta dentro de ella".
