"Si extender derechos es una especulación, ojalá todos especularan", dijo Fuentes
El titular de la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado, Marcelo Fuentes, afirmó hoy que "si extender derechos es una especualación, ojalá todos especularan", al defender la iniciativa oficial de que los jóvenes puedan votar a partir de los 16 años.
"Me sorprende cuando dicen que es una maniobra desesperada para conseguir votos. Si extender derechos es una especualación, ojalá todos especularan. Buscar votos es la esencia de la política. La naturaleza del que gobierna es que la gente lo acompañe y lo comprenda", dijo el senador en diálogo con radio La Red.
Fuentes se refirió así a los proyectos de ley de los senadores kirchneristas Elsa Corregido y Aníbal Fernández, que habilitan el voto de manera optativa para los jóvenes desde los 16 años, que comenzaron ayer a ser discutidos en comisión en el Senado.
El senador criticó a los dirigentes opositores que rechazaron la iniciativa, al señalar que "el problema es de aquellos que renuncian a una vocación de poder, agotan sus agendas, no tienen capacidad de autonomía y se limitan a repetir como loros los titulares de los diarios".
En ese marco, Fuentes defendió la militancia de los jóvenes al señalar "cómo no vamos a estar orgullosos de que los jóvenes conciban a la política como una acción superior, una actividad digna, concebida desde el bien común y la soldiaridad".
"Yo prefiero que los jóvenes se formen en una militancia solidaria. Esa etapa es la única en la cual se es auténticamente honesto intelectualmente. Es el momento donde los jóvenes se abrazan a las causas políticas y no hay que tenerles miedo", afirmó.
Contó asimismo que la iniciatvia se debate en el seno de su familia, con sus hijos de 16 y 24 años.
"El mayor desde chico se sumó a la militancia política y social en forma apasionada, pero mi hija no tiene ganas de votar. Yo soy oficialista y por eso me pega cada palazo que me deja rengo", contó el legislador sobre las críticas que recibe de su hija.
En tanto, ante una consulta, dijo que no hay peligro de que ampliar los derechos de votación a partir de los 16 años lleve a una discusión sobre la imputabilidad penal de los chicos a esa edad.
"Son cosas distintas. Los tratados internacionales ponen límites. La imposición en torno a la persecución penal de los menores es sobre la base de un debate que la sociedad y el Estado se imponen a sí mismos; es decir, debo en una determinada etapa dedicar más esfuerzos a educar, dar trabajo y no perseguir penalmente", explicó.
No obstante, dijo que "con el dolor no se puede discutir" y que "ante un asesinato y un familiar que clama por justicia y venganza, la discusión no es posible llevarla adelante", por lo que pidió "tener mucho cuidado en la discusión sobre los menores".
