La fiscal, que investiga el cuádruple crimen de una familia en una casa de esa localidad bonaerense, indagará este jueves al joven aprehendido por el caso y solicitó además la captura de Diego Perotti, el preso que violó las salidas transitorias y era pareja de unas de las víctimas.
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La fiscal María de los Ángeles Attarian Mena informó a Télam que hoy solicitó al Juzgado de Garantías 4 de Berazategui la detención formal de Leonel Soria (21) por el delito de "homicidio calificado por alevosía" y que mañana al mediodía lo va a indagar.
El lunes a la noche, apenas se descubrieron los homicidios, Soria fue aprehendido por "encubrimiento agravado" pero al avanzar con la pesquisa, la instructora judicial recolectó más elementos que la llevaron a imputarle al joven la coautoría de la masacre.
Entre esos elementos, la fiscal consideró los resultados de las autopsias que arrojaron que las víctimas fueron asesinadas con distintas armas, por lo que se cree que actuó más de una persona.
Por ello la funcionaria judicial solicitó la detención formal y captura de Perotti (33) por el mismo delito que le atribuye a Soria y también en calidad de coautor.
Consultada de lo ocurrido anoche con el incendio de distintos objetos de la casa donde ocurrió el hecho por parte de familiares y vecinos de las víctimas, la fiscal descartó que se hayan perdido evidencias de interés para la causa.
"Estuve trabajando en el lugar junto a Policía Científica durante cuarenta y ocho horas. Y una vez que se recolectó toda la evidencia necesaria, se entregó el lugar a los familiares", explicó.
Sobre la motivación del cuádruple crimen, la fiscal dijo a la prensa que "los testigos manifiestan que el móvil sería quedarse con la propiedad" de las víctimas, aunque aclaró que "se están estudiando distintas líneas de investigación".
La fiscal se excusó de dar detalles referidos a si Perotti había violado sus salidas transitorias pero si confirmó que el ahora prófugo fue demorado el domingo pasado por la policía de Hudson.
"En mi mismo turno y en la misma seccional, esta persona dio otra identidad al momento de ser aprehendido. Era un delito no detenible (robo simple) y por eso la persona se fue en libertad", precisó.
Y en ese sentido agregó: "En el sistema que los fiscales consultamos (la identidad de los aprehendidos y que no es dactiloscópico) no surgió ninguna situación que ameritara la detención o saltara un pedido de captura para esa persona".
Además, la fiscal analizaba la situación de un hijo adolescente de Perotti que huyó de la casa donde ocurrieron los homicidios junto a su padre.
Perotti era novio desde hacía ocho meses de Lorena Sosa (21), una de las víctimas de la masacre junto a su hija Jazmín (3), su padre Pablo Sosa (65) y su hermanastro Javier Lucce (25).
Este sospechoso estaba preso en la Unidad Penal 9 de La Plata desde hacía ocho años por un robo calificado, pero desde marzo pasado gozaba de salidas transitorias y nunca más regresó.
La sospecha de los investigadores es que Perotti cometió el cuádruple crimen junto a por lo menos un cómplice para quedarse con la casa en la que vivía junto a su novia y el resto de los familiares de ésta.
De acuerdo al resultado de las autopsias, Lorena Sosa fue asesinada a golpes en la cabeza provocados con una maza, al igual que su hija Jazmín.
En tanto, Pablo Sosa fue asesinado a golpes provocados con un pico y presentaba un corte en el cuello, mientras que su hijastro Javier Lucce tenía heridas en la cabeza también provocados por el mismo pico y cortes en el cuello.
La principal sospecha de los investigadores es que las cuatro víctimas fueron asesinadas cuando descansaban en sus camas y que ninguna tuvo posibilidad de defenderse.
Tanto la maza como el pico fueron encontrados en la escena del crimen y los peritos constataron que son las armas homicidas.
Según las fuentes judiciales, las heridas cortantes que presentaban los hombres fueron producidas por dos armas blancas distintas, una con una cuchilla y la otra con un cuchillo, los cuales no fueron hallados en la escena del crimen.
El hecho fue descubierto el lunes, en la vivienda situada en calles 138 y 59, de Hudson, partido de Berazategui, en la zona sur del conurbano.
Tras una denuncia por averiguación de paradero realizada por la madre de Lorena Sosa, sus parientes y vecinos comenzaron a excavar en el frente de la propiedad y luego la Policía terminó por encontrar los cuatro cuerpos enterrados y colocados de manera superpuesta en una misma fosa cubierta por un contrapiso.
"Todos estaban vestidos y la única que estaba envuelta en una sábana era la niña", dijo a Télam una fuente judicial.
Los investigadores aseguraron que esta mañana la fiscal Attarian Mena autorizó la entrega de los cadáveres a sus familiares para que pudieran velarlos.
