La violencia intrafamiliar fue el principal tipo de homicidio contra mujeres en la ciudad de Buenos Aires durante 2011, según un informe del Instituto de Investigaciones de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, presentado esta semana.
Si bien la cantidad de mujeres asesinadas en Capital en 2011 sólo representa un 14,2 por ciento del total de los crímenes cometidos -27 sobre 190 víctimas-, del estudio surge que más de la mitad de esos homicidios, el 52 por ciento, fueron en el seno de la familia.
La cifra aumenta levemente si se la compara con 2010, primer año en el que el máximo tribunal de la Nación efectuó el estudio, ya que por entonces las mujeres asesinadas fueron 24 de un total de 168 víctimas.
Catorce de las 27 mujeres asesinadas falleció a manos de un familiar, mientras que el mismo móvil representó una cifra poco significante en el caso de los hombres, sólo 6 de las 163 víctimas masculinas del mismo período trabajado.
El estudio de la Corte Suprema determinó la relación entre las víctimas (20 en total sumando mujeres y hombres) y quienes resultaron imputados de los crímenes: la mayoría de los casos eran cónyuges, concubinos o novios (9) y en menor grado ex parejas (3), con algún vínculo filial o fraternal (4) y otro tipo de relaciones (4).
Para perpetrar los crímenes, el arma blanca fue la más utilizada (9 casos), seguida de las de fuego (5), otras (4) y ninguna (2), en tanto que el lugar donde fueron los homicidios fueron en su mayoría un domicilio particular (13 hechos), seguido de la vía pública (5), comercio (1) y otros (1).
El día de la semana en el que se registraron más hechos fue el sábado (5), seguido del domingo (4), lunes y miércoles (3 en cada uno), jueves y viernes (2 en cada uno) y martes (1).
Respecto de los horarios de la comisión de los homicidios, se produjeron más crímenes intrafamiliares durante el mediodía y la tarde (9 casos), la madrugada (5), la noche (4) y el resto por la mañana.
En tanto, las otras víctimas de sexo femenino que murieron en 2011 fue por motivos desconocidos (6 casos), por robos (4), por riña, ajuste o venganza (1), legítima defensa (1) y otras causas (1).
Otro dato destacable que se desprende del informe presentado el por el juez de la Corte Suprema Eugenio Raúl Zaffaroni es el que tiene que ver con la división de la Capital Federal que los investigadores establecieron entre dos zonas con diferente "concentración homicida".
Mientras que los barrios de emergencia incluidos en la zona sur, a la que se le sumó los barrios de Retiro, Liniers, Mataderos y Parque Avellaneda, presentan la mayor tasa homicida de la Ciudad -40,34 casos cada 100.000 habitantes-, sólo se registraron allí dos de todos los asesinatos de mujeres a manos de familiares.
En cambio, en Balvanera (Congreso), hubo cuatro casos y el resto se produjo en diferentes lugares de la Capital Federal, desde Palermo hasta Villa Ortúzar.
A diferencia del resto de los móviles homicidas, la mayor parte de los asesinatos en contexto intrafamiliar no fueron cometidos en los sectores de más bajos recursos de la Capital Federal.