Diputados de la oposición porteña y delegados del subte pidieron en la Legislatura y ante funcionarios del PRO que el Gobierno porteño de marcha atrás con el proyecto de traspaso del subte.
Al considerar que además de impulsar un impuestazo, viola derechos laborales al impedir huelgas.
En ese marco, legisladores y representantes gremiales plantearon abrir un nuevo debate, en el que se sumen otras iniciativas parlamentarias.
El pronunciamiento se dio en el marco de un plenario de las comisiones de Obras y Servicios Públicos y de Presupuesto y Hacienda de la Legislatura, donde se dieron cita una veintena de diputados, junto a los metrodelegados Claudio Dellacarbonara y Roberto Pianelli, en representación de los trabajadores del subte que mantienen cortes escalonados del servicio por una puja salarial.
La reunión en la Legislatura tenía como objetivo dar inicio al debate de la propuesta del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri que, en principio, tiene fecha para ser puesta en consideración en el recinto el 13 de diciembre, y para ello concurrieron los representantes del Ejecutivo Juan Pablo Piccardo, titular de Subterráneos de Buenos Aires, y Carlos Walter, presidente de la AGIP porteña.
No obstante, el PRO no salió cómodo del encuentro -que continuará con una segunda reunión el lunes a las 12- ya que fueron unánimes las críticas de los diputados de la oposición al proyecto de traspaso que prevé, entre otras cosas, financiar el servicio del subte con aumentos a los peajes y a las patentes de autos de alta gama y el cobro extra al consumo de combustible.
Pero también plantea la declaración “de servicio público esencial” al subte, lo que restringe la posibilidad de los trabajadores a cumplir una huelga ya que advierte que “la obstaculización o interferencia de la operación del servicio subte constituirá en una infracción administrativa grave" que puede dar paso a una denuncia penal.
Al respecto, el diputado Fabio Basteiro, del bloque Buenos Aires para Todos, sostuvo que la iniciativa es "anacrónica y con un alto voltaje de provocación que no puede tratarse seriamente porque contiene un articulado que viola la Constitución Nacional y de la Ciudad".
Por su parte, el legislador de Confianza Pública Daniel Amoroso, que suele votar junto al PRO, se diferenció en esta oportunidad al advertir que no va a acompañar "el capítulo del proyecto que afecta a los derechos laborales, entre ellos, el de huelga" y exhortó a los dirigentes del PRO a "dar comienzo a un debate en serio".
En ese sentido, la intención de los legisladores es abrir la discusión en torno al traspaso del subte a través de incluir en el temario de la reunión del lunes los otros cinco proyectos de financiamiento presentados en las últimas semanas por los diputados Rafael Gentili, Fernando Sánchez, Alejandro Bodart y Basteiro.
En tanto, los metrodelegados pidieron, al tomar parte de la reunión en el salón Montevideo, que "se deseche" el proyecto del PRO porque "más que el traspaso, parece que están más interesados en destruir la organización de los trabajadores".
"Desgraciadamente nos encontramos con un proyecto que tiene una cantidad de artículos que limitan las libertades democráticas y el derecho a huelga violando los derechos constitucionales", aseguró Pianelli.
Por su parte, Dellacarbonara invitó a los funcionarios y diputados del PRO a "acompañar la jornada laboral de los trabajadores del subte, sobretodo, ahora en los meses de verano".
Casi al finalizar la reunión, Piccardo dio algunas precisiones sobre el proyecto y rechazó que "el objetivo sea cercenar los derechos de los trabajadores, porque son ellos las caras visibles de la empresa, como lo son las azafatas de los aviones".