El desborde del Río Paraguay dejó bajo el agua las viviendas de más de 700 familias en las zonas ribereñas de la capital paraguaya, y la municipalidad anunció el alerta roja al esperarse nuevas lluvias para este fin de semana.
Mientras en las últimas horas el nivel de las aguas del río Paraguay continúa subiendo, el intendente de Asunción, Arnaldo Samaniego, dijo que se prevé que continúe la crecida de acuerdo con las previsiones de los expertos por lo cual es necesario permanecer alertas para la asistencia a las personas residentes en sus riberas.
Unas 275 familias ya fueron evacuadas, especialmente de la ribera norte, pero el nivel del agua en el río Paraguay ya alcanza los 4,76 metros, cerca de los cinco metros, tope para comenzar a aplicar medidas excepcionales de ayuda a los pobladores.
Por otra parte, un boletín meteorológico confirmó anoche que se espera la reanudación de las lluvias a partir del próximo viernes, incluso en la extensa planicie del Chaco paraguayo, escenario de importantes inundaciones en las últimas semanas, según despachos de IPParaguay y Prensa Latina.
El principal problema para la atención de los damnificados es el de la localización de terrenos, donde puedan edificar nuevas viviendas, pues se están utilizando albergues provisorios en unidades de las fuerzas armadas y un parque capitalino.