Cuatro personas murieron en el sur de Afganistán cuando fuerzas de seguridad repelieron un ataque contra la oficina del gobernador de Kandahar.
Un portavoz talibán se atribuyó el ataque de este sábado contra el gobernador Tooryalai Wesa, que estaba en su oficina cuando se produjeron los hechos.
El portavoz de Wesa, Zulmai Ayobi, indicó que dos suicidas y dos guardaespaldas del gobernador murieron en el enfrentamiento que se produjo cuando los talibanes entraron en el edificio llevando chalecos explosivos.
Los insurgentes fueron abatidos antes de que pudieran detonar sus bombas, reportó la agencia DPA.
También resultaron heridos un policía afgano y un soldado extranjero, según una fuente de seguridad local. Que también agregó que fueron descubiertos y desactivados dos coches bomba.
Por otra parte, las fuerzas comandadas por la OTAN informaron de la muerte de un soldado en el sur de Afganistán como resultado de un incidente no militar, pero no aportaron detalles del motivo del deceso ni del lugar donde ocurrió.