Portugal vive este sábado una nueva jornada de masivas protestas populares contra las políticas de ajuste, tanto en la capital, Lisboa, como en las principales ciudades del país.
Estas manifestaciones forman parte de la jornada internacional "Global Noise" contra la deuda de los Estados, informó la televisora Telesur.
El dato distintivo de estas protestas es que además de los movimientos sociales y distintas ONGs que acostumbran a impulsarlas, se sumaron actores, músicos, cantantes, bailarines y, también, la principal central sindical lusitana, la CGTP.
El descontento social adquirió una dimensión sin precedentes en Portugal desde que el país, al borde de la quiebra financiera, recibió en mayo de 2011 una ayuda excepcional de 78.000 millones de euros de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional.
El pasado 21 de septiembre, el conservador primer ministro Pedro Passos Coelho, debió soportar una masiva movilización popular que rechazó de plano el anuncio de una rebaja salarial del 7%.
Un día más tarde, acorralado por las críticas, la presión social y las protestas callejeras, Passos Coelho tuvo que far marcha atrás en su polémica medida de recorte salarial.
No obstante estos antecedentes, que se repiten con continuidad en casi todos los países de laUnión Europea, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, no dudó ayer en defender a rajatabla las políticas de ajuste.
"Siempre estoy preocupado por las protestas. Pero si te preocupas por las protestas nunca podrás llevar a cabo políticas sostenibles", afirmó el funcionario alemán en ocasión de asistir a la asamblea anual del FMI y el Banco Mundial.