La reforma laboral y el ajuste aplicado por el gobierno de Mariano Rajoy profundizaron la recesión y elevaron el desempleo a un nuevo nivel histórico en España. Una de cada cuatro personas carece de trabajo.
El número de desempleados en España aumentó en 53.500 personas en el segundo trimestre y sumó 5.693.100, lo que equivale al 24,63% de la población económicamente activa, según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
La tasa actual de desempleo (24,63%) no sólo rompe el récord histórico de 24,55%, registrado a inicios de 1994, sino que supera el máximo previsto por el gobernante Partido Popular (PP) para todo el 2012.
Pero quizás la cifra más alarmante es la de desempleo juvenil (menores de 25 años): abarcó al 53,28% de los jóvenes en el segundo trimestre, marcando un nuevo techo histórico.
“Se está produciendo una destrucción masiva de empleo, las políticas del Ejecutivo son erróneas y Rajoy tiene que rectificar con urgencia”, afirmó la Secretaria de Empleo de la central sindical Comisiones Obreras (CC.OO), Paloma López.
Toni Ferrer, secretario de Acción Sindical de la Unión General de Trabajadores (UGT), señaló que los nuevos datos “vienen a confirmar el fracaso de las políticas del PP en estos seis meses, en un trimestre que tradicionalmente es de los mejores para la ocupación se destruye empleo”, sostuvo el dirigente sindical.
El gobierno, a través del secretario de Economía, Fernando Jiménez Latorre, admitió que el dato del incremento del desempleo “no es positivo”, pero aseguró que estaba “en línea” con las previsiones y que confirmaba que buena parte del “ajuste” en el sector privado ya se habría llevado a cabo.
Los contratos de la temporada turística de Semana Santa y del verano no sirvieron para frenar el desempleo, que continuó su escalada en épocas caracterizadas por la demanda de trabajo.
Respecto al mismo período del año anterior, la situación es sensiblemente peor: entre abril y junio de 2011, los desocupados disminuyeron en 76.500 personas y se crearon 151.400 empleos, mientras que ahora se perdieron 15.900 puestos de trabajo.
Un dato alarmante es el número de hogares que tiene a todos sus miembros activos desempleados, que experimentó un aumento de 153.400 respecto al trimestre anterior y se sitúa en 1.728.400.
Entre los extranjeros, el desempleo disminuyó en 59.700 personas respecto al trimestre anterior, hasta situar el total de los desempleados en 1.233.400, lo que dejó su tasa de desempleo del 35,76 %, 13 puntos más que entre los españoles.
Este dato se puede igualmente matizar, ya que muchos inmigrantes están abandonando España para regresar a sus países o se desplazan al norte de la Unión Europea en busca de nuevas oportunidades.
Por sectores, la mayor subida de desempleo se produjo en la industria (23.500), seguida por la agricultura (11.400), mientras que se registraron descensos en servicios (84.500 personas menos) y la construcción (40.500 menos).
Otro dato muy relevante es el aumento del desempleo en el sector público, donde entre abril y junio se destruyeron 63.000 puestos de trabajo debido a los ajustes.
Un dato que contribuye al aumento del desempleo es el incremento de la población activa, que creció en 37.600 personas y se situó en los 23,11 millones.