Hoy es una fecha más que relevante para el mundo del espectáculo. Dos personajes de la cultura popular de nuestro país cumplen distintos aniversarios de sus respectivas muertes.
Hoy se cumplen dos aniversarios de muerte de dos íconos de la música. Tan lejanos en su tiempo, pero tan metidos en la piel de la gente. Carlos Gardel, el "Zorzal Criollo" y "El Potro" Rodrigo Bueno murieron un 24 de junio, ambos en distintos accidentes. Del primero, se cumplen hoy 77 años; del segundo, 12 años.
Referentes de dos géneros populares, uno del tango y el otro del cuarteto, murieron quizás en la mejor etapa de sus carreras. Carlos Gardel y su comitiva se hallaban en Colombia realizando una serie de actuaciones con motivo de la promoción de las películas que el cantor había filmado recientemente para la Paramount en los Estados Unidos.
"El pájaro de hojalata", como le llamaban al avión en el que viajó por última vez, no se elevó y se estrelló contra otro avión en la pista de Medellín y el "zorzal criollo" murió. Era el 24 de junio de 1935.
En el caso del "Potro" Rodrigo Bueno, su accidente fatal ocurrió el 24 de junio del año 2000. Aquel día, Rodrigo había concurrido a la grabación del programa de Jorge Guinzburg "La Biblia y el calefón", y luego se fue a cenar junto con su representante, sus músicos, su pequeño hijo y la madre de éste en un restaurante porteño, para viajar posteriormente a La Plata para un show.
Aquel recital se transformó en el último y fue grabado por el programa televisivo "El Rayo", conducido en ese entonces por Dolores Barreiro.
Tras aquella actuación, el cantante emprendió viaje hacia Buenos Aires en su Ford Explorer color roja, pero sufrió un accidente a la altura de Berazategui.
La 4x4 dio contra el guarda rail, volcó y dio varias vueltas. El cantante perdió la vida al igual que Fernando Olmedo (hijo de Alberto Olmedo), quien lo estaba acompañando en esa noche. Ninguno llevaba puesto el cinturón de seguridad, aunque los demás acompañantes sobrevivieron.
Carlos Gardel y Rodrigo Bueno fueron dos grandes a los que unió un destino trágico. Y aunque de dimensiones diferentes -Gardel fue un artista de renombre y trayectoria internacional y fue considerado como el dueño de una de las voces más destacadas de todos los tiempos- sus muertes fueron tomadas como las de dos íconos populares que ocasionaron un profundo dolor entre sus miles de seguidores.
Referentes de dos géneros populares, uno del tango y el otro del cuarteto, murieron quizás en la mejor etapa de sus carreras. Carlos Gardel y su comitiva se hallaban en Colombia realizando una serie de actuaciones con motivo de la promoción de las películas que el cantor había filmado recientemente para la Paramount en los Estados Unidos.
"El pájaro de hojalata", como le llamaban al avión en el que viajó por última vez, no se elevó y se estrelló contra otro avión en la pista de Medellín y el "zorzal criollo" murió. Era el 24 de junio de 1935.
En el caso del "Potro" Rodrigo Bueno, su accidente fatal ocurrió el 24 de junio del año 2000. Aquel día, Rodrigo había concurrido a la grabación del programa de Jorge Guinzburg "La Biblia y el calefón", y luego se fue a cenar junto con su representante, sus músicos, su pequeño hijo y la madre de éste en un restaurante porteño, para viajar posteriormente a La Plata para un show.
Aquel recital se transformó en el último y fue grabado por el programa televisivo "El Rayo", conducido en ese entonces por Dolores Barreiro.
Tras aquella actuación, el cantante emprendió viaje hacia Buenos Aires en su Ford Explorer color roja, pero sufrió un accidente a la altura de Berazategui.
La 4x4 dio contra el guarda rail, volcó y dio varias vueltas. El cantante perdió la vida al igual que Fernando Olmedo (hijo de Alberto Olmedo), quien lo estaba acompañando en esa noche. Ninguno llevaba puesto el cinturón de seguridad, aunque los demás acompañantes sobrevivieron.
Carlos Gardel y Rodrigo Bueno fueron dos grandes a los que unió un destino trágico. Y aunque de dimensiones diferentes -Gardel fue un artista de renombre y trayectoria internacional y fue considerado como el dueño de una de las voces más destacadas de todos los tiempos- sus muertes fueron tomadas como las de dos íconos populares que ocasionaron un profundo dolor entre sus miles de seguidores.
