
Comentario de Rafael: Rafael's remark: Tal como lo sabe cualquier persona que siga de cerca el boxeo, la división de peso pesado no ha sido tan buena últimamente. Los hermanos campeones Klitschko son fuerzas dominantes que usualmente aplastan a sus oponentes ya sea con grandes nocauts o con amplias victorias por decisión. Pero si se saca a los hermanos de esta ecuación, hay algunas peleas interesantes para hacerse en esta división, y ésta fue una de ellas. En los papeles, lució como una pelea entretenida. En el ring, Povetkin y Huck produjeron un mini-clásico y una de las mejores y más excitantes peleas de peso pesado en años, y los fanáticos estadounidenses pudieron verla en vivo en la cadena Epix.
Povetkin, de 32 años y oriundo de Rusia, es un ex medallista olímpico en el peso súper pesado en 2004 que ahora pelea con base en Alemania. Él ganó un título de segundo nivel (el ridículo título "regular" de la AMB) en agosto al superar por puntos al ex campeón Ruslan Chagaev en una pelea muy dura. Pero después de que Povetkin hiciera su primera defensa ante un peleador del montón de 42 años como Cedric Boswell en diciembre, Huck, campeón reinante en el peso crucero que es parte del mismo armazón promocional que Povetkin, se presentó en la conferencia de prensa posterior a la pelea. Él pidió pelear con Povetkin, y tres semanas más tarde esa pelea se hizo. Así, Huck, de 27 años y nacido en Serbia residiendo en Alemania, subió al peso pesado para intentar transformarse en el tercer campeón crucero en lograr un título de peso pesado. Los otros fueron Evander Holyfield, ex campeón indiscutido en ambas divisiones, y David Haye, que fue campeón reconocido en el peso crucero y que también se adjudicó una faja de peso pesado. Pero mayormente los pesos cruceros no han tenido mucho éxito en sus campañas de peso pesado.
Pero Huck se mereció ganar esta pelea según muchos observadores. Fue un combate cerrado y muy físico, pero él terminó quedándose con la parte más flaca de una decisión mayoritaria. No debería ser llamada un robo porque Povetkin ciertamente tuvo sus momentos en una pelea cerrada y competitiva. Pero Huck sacudió visiblemente a Povetkin en múltiples ocasiones. Él lo castigó con derechas por encima de la defensa y estuvo enfrente suyo durante toda la pelea. Francamente, Povetkin no lució como si estuviese en la mejor forma posible, y admitió luego de que había tomado a Huck a la ligera. Povetkin también estuvo sin su entrenador Teddy Atlas, de quien se separó luego de un desacuerdo sobre dónde deberían entrenar, si en los Estados Unidos (para que Atlas pudiera acomodar su calendario como comentarista de ESPN, algo que Povetkin había prometido) o Rusia. Atlas fue reemplazado por Alexander Zimin.
El réferi Luis Pabón hizo un trabajo horrible, porque continuamente separaba a los peleadores aún cuando no estaban trabados entre sí. Él nunca los dejó pelear por dentro, lo cual probablemente le costó caro a Huck porque él fue uno de los que estaba haciendo daño cuando ambos estaban peleando de cerca. Povetkin continuamente se inclinaba sobre el lado derecho de Huck, pero Pabón terminaba siempre advirtiendo a Huck por golpear a Povetkin en la nuca. Pabón aparentemente no conoce la regla que dice que un peleador no puede doblarse hasta quedar por debajo de la cintura de su oponente, algo que Povetkin hizo constantemente. Povetkin comenzó bien y controló los tres primeros asaltos antes de que Huck regresara atropellando en el cuarto round para dar vuelta la historia. Su mayor momento llegó a finales del séptimo round cuando él tuvo a Povetkin muy lastimado antes de que sonara la campana del final del round. Más tarde, Huck estaba sangrando por cortes bajo sus ojos y Povetkin estaba exhausto, con su boca abierta.
Fue una fiera batalla, digna de una revancha. Huck, quien lució bien en su nuevo peso aún cuando fue superado en peso por 20 libras, dijo que pensó que ganó y quería una revancha. Es algo ciertamente posible, pero Povetkin primero tiene que enfrentar al ex campeón Hasim Rahman en una absurda defensa obligatoria. Mientras tanto, Huck tiene esta semana para decidir si se quedará con su título de peso crucero o lo dejará vacante para quedarse en el peso pesado. Si decide quedarse en el peso pesado habrá al menos algunas peleas interesantes y lucrativas en su futuro. Si regresa al peso crucero, tiene obligado pelear con el ganador del combate del sábado pasado por el título interino, entre Ola Afolabi (a quien Huck ya derrotó) y el ex campeón Valery Brudov